Propietarios no podrán ofrecer viviendas enteras a turistas para alojamiento en Berlin; lo que hacían a través de sitios como Airbnb, 9Flats o Wimdu.
Quienes viajamos -y nos gusta viajar- sabemos lo importante que fue la irrupción del modelo de economía colaborativa en el mercado de los viajes y el turismo. Lo cierto es que la llegada de plataformas como Airbnb, 9Flats o Wimdu nos permitían acceder a hospedaje de calidad a un precio que podíamos pagar. Pero, la historia de encontrar alojamiento en Berlin por estas vías ya no volverá a ser la misma.
La capital alemana está viviendo un momento de crisis en el mercado de rentas de viviendas, en especial lo que tiene que ver con los habitantes de la ciudad. Esto es, los arrendamientos de largo plazo, destinados a la vivienda y no al ocio y tiempo libre; como lo son los viajes a Berlin.
Berlin se encuentra en franco crecimiento y recibe -cada año- más de 40.000 habitantes nuevos. Todas estas personas, así como los residentes de la ciudad, requieren un sitio donde vivir. Aquellos que no poseen vivienda propia deben -por tanto- procurar una para arrendar.
Pero, al tiempo que esto está sucediendo, los propietarios de las viviendas descubrieron que si las alquilaban a los turistas a través de aplicaciones como Airbnb, Wimdu o 9Flatas, al final del mes sus ganancias crecerían de forma notoria. Y así lo hicieron.
Así, los habitantes de Berlin están compitiendo con los turistas que llegan a la ciudad y que -solo en 2015- compraron más de 6 millones de estadías a través de estos sistemas paralelos a los hoteles en Berlin; quienes vendieron en el mismo período un total de 30,2 millones de camas.
Como resultado, el número de viviendas destinadas a la venta de alojamiento en Berlin creció, al tiempo que la oferta de viviendas destinadas a los habitantes de la ciudad disminiyó de forma considerable. Y con eso, los precios de los arrendamientos aumentaron de a dos cifras año tras año. Esto hizo que el costo promedio de los arrendamientos (por m2) subiera de 5 € en 2004 a más de 10 € en 2016.
Para corregir esta situación, el gobierno comenzó a tomar medidas. Así, el año pasado (2015) se limitó -por Ley- el reajuste que podían aplicarse a los precios de los alquileres. Así, tanto en los nuevos arrendamientos como en las renovaciones de los contratos existentes, los precios no podían incrementarse en más de 10%. Pero la situación no mejoró lo que se pretendía.
Airbnb no será la mejor opción para alojamiento en Berlin. ¿O sí?
El gobierno de Berlin dio un paso más, y ahora decidió multar con hasta 100.000 € a los propietarios de viviendas que arrienden la vivienda entera a los turistas. Es que la normativa -que en realidad fue aprobada en 2014 y entró en vigencia este mes- dispone que los propietarios podrán ofrecer alojamiento en Berlin a través de Airbnb, 9Flats o Wimdu solo si se trata de una habitación en la vivienda propia, aquella en la que se vive. Algo parecido a lo que sucede en Holanda.
Para algunos propietarios, la medida busca -en realidad- defender los intereses de los hoteles en Berlin; mientras que otros habitantes celebran la medida. Por lo pronto, la oferta de alojamiento en Berlin a través de Airbnb cayó más de 40% en los últimos días.
Ahora solo resta esperar y ver qué acontece en los próximos meses. Wimdu anunció apelar la decisión y 9Flats declaró a algunos medios de prensa que esta medida los ha herido de muerte y no saben si lograrán sobrevivir la tormenta. Los habitantes, por su parte, esperan que el acceso a la vivienda resulte más fácil en el futuro cercano.
